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Participaciones del Foro. Fue el Estado: #Ayotzinapa 9 años sin #Memoria, #Verdad ni #Justicia

Martes 26 de septiembre de 2023, por Comité Cerezo México

Participaciones del Foro. Fue el Estado: #Ayotzinapa 9 años sin #Memoria, #Verdad ni #Justicia realizado el lunes 25 de septiembre en la FFyL de la UNAM dentro del PAPIME PE405323 «Estrategias Didácticas para la transversalización de las áreas de preespecialización de la licenciatura en Desarrollo y Gestión Interculturales»

No fue mala suerte o la droga. Fue el Estado

El 26 de septiembre de 2014 es una fecha emblemática más que se suma a la larga lista de fechas que conmemoramos como resultado de la estrategia contrainsurgente del Estado mexicano.

2 de octubre de 1968, la Masacre de Tlatelolco; 10 de junio de 1971, la Matanza del Jueves de Corpus, también conocida como “El Halconazo”; 22 de diciembre de 1997, la Masacre de Acteal; 28 de junio de 1995, la Masacre de Aguas Blancas; 7 de junio de 1998, la Masacre de El Charco; 26 de septiembre de 2014, Ayotzinapa.

¿Qué es igual en el caso Ayotzinapa con respecto a los otros casos? La respuesta es simple, la impunidad como política de Estado para proteger al Ejército.

¿Qué es diferente con respecto a los otros eventos? El nivel o grado de impunidad.

En el mensaje final del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), presentado el 25 de julio de este año, se hace un recuento de las fases que ha tenido el acompañamiento internacional y de la respuesta del Estado en estas diferentes etapas.

También recuerdan que no es gracias a la voluntad política del Estado que se formó este grupo de apoyo especializado internacional, sino como producto de una medida cautelar de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y aunque ya no se menciona, dicha medida cautelar fue aceptada por el gobierno ante el costo político generado por el amplio movimiento social que de manera solidaria clamaba en las calles por la aparición con vida de los 43 y por la justicia.

Es gracias al trabajo del GIEI que se puede demostrar científicamente lo que todos ya sabíamos, qué la Verdad Histórica era una mentira creada conscientemente por el gobierno mexicano con la intensión de proteger a los responsables, al ejército, siempre al ejército, como en todas las masacres anteriores que mencionamos al inicio, proteger a los perpetradores, al ejército, porque como siempre ha sido, obedecen las órdenes de quienes a través de la Democracia Liberal ejercen el poder.

Es, esta institución, el ejército, la encargada de implementar los mecanismos necesarios, de espionaje, vigilancia y control social mediante el terror, para implementar y llevar a cabo la estrategia contrainsurgente del Estado mexicano, cuyo objetivo ha sido siempre y lo sigue siendo, eliminar, y cuando es necesario físicamente, a la disidencia social, personas, como cualquiera de los que nos escuchan, que, también como nosotros, estamos profundamente convencidos de que la política y la democracia debe tener como centro el respeto a la Dignidad Humana y no, como lo ha sido desde la Revolución Mexicana, el interés por despojar y acumular la riqueza que produce nuestro trabajo.

Como ya habíamos expuesto ante los estudiantes del Grupo de Lingüística Popular de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM, es necesario, no sólo saber que ocurrió la desaparición forzada de 43 estudiantes y la ejecución y ataques en contra de otros más en ese mismo evento, hay que saber por qué ocurrió, cuáles son los mecanismos que permiten este tipo de hechos y por qué además en contra de los estudiantes de Ayotzinapa.

Como siempre lo hemos hecho, en el taller de análisis de la realidad, preguntamos cuántas realidades hay y ahora lo hago nuevamente a ustedes, ¿cuántas realidades existen? Si bien nos han tratado de convencer de que existen varias, muchas o tantas como personas hay en este planeta, 7,900 millones de realidades, la realidad es que está es una sola y es una sola porqué desde los DH se trata de encontrar la verdad histórica, es decir, que pasó en realidad, si partimos de que hay varias realidades, entonces la “Verdad Histórica” que construyó el Estado mexicano para justificar que no habían participado en los hechos de Ayotzinapa es una realidad o el cuento del quinto camión y un poder del narco más poderoso que el mismo Estado es otra realidad, nada más vean el análisis chato que hacen de los hechos que ocurren actualmente en Chiapas, dónde según, las mentes más brillantes que analizan la realidad, concluyen de manera equivocada que el narcotráfico es más poderoso que el mismísimo Estado y con ello evaden la responsabilidad del Estado, el cual, como dice otra teoría sin fundamento en la realidad, es un Estado fallido, un Estado que quiere pero no puede, que está rebasado o simplemente es un Estado, decimos de manera sarcástica, con capacidades diferentes, lean las noticias para que vean cómo el discurso no siempre refleja la realidad.

También gracias a esta concepción de las varias realidades, nos han metido hasta el tuétano que el Estado es el conjunto del Gobierno, la población y el territorio, pero si vemos cualquier sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en contra del Estado mexicano por graves violaciones ocurridas en México, no mencionan que la población o las piedras que encontramos en cualquier parte de nuestro territorio también tienen responsabilidad en estas graves violaciones a los derechos humanos, no, es el Gobierno el responsable, los agentes de Estado, quienes perpetraron, además porque son los únicos que pueden hacerlo, las violaciones a los derechos humanos.

Y así podemos ir mencionando varios ejemplos de lo perniciosa que ha sido la teoría relativista de la multiplicidad de realidades, que sólo ha servido a los intereses de quienes no desean que veamos la realidad y que comprendamos que es injusta y además menos, que participemos para transformarla.

Sin embargo, decimos que la realidad es más terca que mil escritos sobre la misma realidad, nosotros partimos de que el Estado nace como un órgano de represión de una clase contra otra, nace en el capitalismo, que es el modelo económico en el que vivimos y que, para ocultar su verdadero fin, nos han vendido la idea que es un órgano que regula este conflicto de intereses entre los que quieren poseerlo todo y quiénes son despojados de todo y así nace una idea dónde el Estado es un intermediario y por tanto es un ente neutral que resuelve los conflictos sociales, nada más alejado de la realidad.

Incluso nos han convencido que votar es la única forma que existe para cambiar el tipo de gobierno que queremos, omiten deliberadamente que en el discurso de los derechos humanos, el derecho humano a la protesta es también una herramienta que permite la transformación social, sin protesta ante las injusticias es imposible mejorar las condiciones materiales de la población mexicana, nada más recuerden que una huelga realizada allá en los lejanos 1999-2000 permite que ustedes mismos estén aquí en esta universidad, si no se hubiera recurrido al derecho humano a la protesta, les sería al 90% de ustedes imposible pagar por gozar del derecho humano a la educación y aun así, cuántas injusticias no se cometen desde las autoridad en contra de estudiantes, maestros y trabajadores en esta universidad.

Si no ejercemos el derecho humano a la protesta no es posible ninguna trasformación social, lo hemos visto y vivido, el voto, aunque también es un derecho que podemos ejercer, incluso ha servido para tener gobiernos con una posición más de derecha, es decir, más represivos, más asesinos, gobiernos que en los últimos tres sexenios sirvieron para convertir los derechos humanos en mercancías, así si no tienes dinero, simplemente no puedes gozar de ese derecho, y no sólo eso, sino que incluso ese derecho en lugar de estar garantizado por el Estado con los impuestos que pagan sus padres y todo mexicano que compre cualquier cosa, se lo gastan en sueldos millonarios para nuestras autoridades universitarias, incluso nos hacen aplaudirle a quiénes nos han despojado por generaciones del fruto íntegro de nuestro trabajo, por ejemplo en la UNAM hay una beca alimentaria para estudiantes de bajos recursos y bajo rendimiento, pero esta beca no es pagada por el Estado como debería de ser, es un apoyo que desde el corazón del millonario preferido de México, (acá empiezan a soltar lagrimitas de felicidad y agradecimiento quienes gozan de dicha beca) Carlos Slim quién para lavar sus pecados, pero sobre todo para no pagar impuestos, a través de la Fundación Carlos Slim “apoya” una alimentación saludable para los universitarios más pobres.

No sería mejor tener empleos y salarios justos y dignos, por cierto otro derecho humano, para poder solventar las necesidades básicas de todos los habitantes de nuestro país, y lo mismo pasa con el derecho a la salud, a la educación, a una vivienda adecuada, y podemos enumerar otros muchos derechos humanos que de manera generalizada son violados en nuestro país.

De los que trabajan, o que sus padres trabajan, ¿a cuántos les han pagado horas extras, dobles y triples? ¿Cuántos de ustedes esperan tener vacaciones pagadas, reparto de utilidades, permisos maternales pagados? Sabían qué hace unos 110 años existió un país que otorgaba dos años pagados de maternidad, y actualmente en México apenas vamos en los 84 días de permiso en algunos trabajos, no en todos.

Todo este rollo mareador nos sirve para introducir el otro concepto muy usado y desgastado llamado democracia, si ustedes van al diccionario, por ejemplo el de la Real Academia Española y buscan democracia, encontrarán que no tiene un solo significado, tiene cuatro significados y ocho apellidos, pero en esencia dice que la democracia es un sistema político en el cual la soberanía reside en el pueblo y que la ejerce directamente o por medio de representantes.

Ahí van a encontrar la que actualmente nos rige en México y es la señalada como democracia liberal o burguesa, la cual está basada en el reconocimiento de los derechos individuales y se ejerce a través de los representantes políticos de los ciudadanos y encontraran una democracia con un significado totalmente contrario, la democracia popular, que es el sistema de gobierno de las dictaduras comunistas, así a secas, pero que, metemos la mano para explicarla un poco más, es la democracia de la mayoría, la cual está basada en el reconocimiento de los derechos colectivos sobre los individuales.

Ya vimos en un inicio que el Estado es un órgano de represión de una clase contra otra y actualmente en el capitalismo existen dos clases fundamentales y además opuestas, los fifis y los chairos como dice su presidente cabecita de algodón, la clase en el poder, llamada burguesía y la clase que no tiene el poder y que es mayoría, la clase proletaria o trabajadora, por lo tanto la democracia que al gobierno le gusta mencionar no tiene apellido, nos han logrado convencer que su significado es universal y no hay otro, sin embargo la democracia tiene un carácter de clase.

Existe la democracia liberal, burguesa o fifí, que es la que representa a la clase actualmente en el poder, la burguesía, los ricos, los explotadores, los neoliberales, los capitalistas, la minoría, que son, todos, lo mismo y que se basan en el reconocimiento de los derechos individuales sobre los derechos colectivos, o existe la democracia popular, en franco retroceso, que es la que representaría a la clase que actualmente no tiene el poder y que somos la mayoría, los proletarios, los trabajadores, los explotados, el pueblo pobre, los chairos, etc. Y que se basa en el reconocimiento de los derechos colectivos sobre los individuales.

Así que cuándo el gobierno habla de democracia, en realidad está pensando y actuando en fortalecer la democracia liberal o burguesa, y cualquier cambio a esta forma de democracia significa debilitarla y fortalecer a su opuesto, la democracia popular, a la democracia de las mayorías, de los explotados, del pueblo, sobre la democracia de la minoría, de los explotadores, de los millonarios.

Por eso, la defensa de la democracia liberal es furibunda, es rabiosa, ya que atenta contra la ganancia capitalista y su base, la explotación laboral de millones de trabajadores.

Existe otra posición, que es la que actualmente gobierna en México y que quiere otro tipo de democracia, la democracia representativa, que es aquella en dónde los representantes son elegidos por el pueblo para que los gobierne, sin embargo una condición para la existencia de este tipo de democracia en la inexistencia de las clases sociales, por tanto no es posible su existencia, así la democracia actual también es una democracia liberal o burguesa, si bien no representan a la derecha, tampoco quieren destruir la democracia liberal, sólo quieren limarle los colmillos para que el pueblo no sufra tanto, diría AMLO: “que el rico no sea tan rico y que el pobre no sea tan pobre” basa su proyecto en la imposibilidad de la democracia representativa, por tanto, la socialdemocracia y ese es su rasgo fundamental en la historia de la humanidad, es que, para limarle los colmillos al lobo capitalista no pueden dejar de ser representantes de la misma democracia liberal que los aborrece, como ejemplo tenemos las reformas sobre el outsourcing y la, recién aprobada, ley minera, que no toca la base de esta democracia liberal, pero como si la modifica, eso los hace “un peligro para México” (donde México quiere decir: sistema burgués mexicano donde los ricos debemos seguir siendo los ricos y los pobres, nuestra fuente de riqueza).

Así que cuándo escuchen a la ultraderecha decir que defiende la democracia, hay que tener claro que defienden que una minoría siga viviendo de la explotación de la mayoría y que cuando la socialdemocracia en el poder dice que los cambios son para fortalecer la democracia, están defendiendo la utopía de una sociedad donde el lobo (el capitalismo) niega su naturaleza y se vuelva vegetariano (no explote tanto).

Por ello, podemos ver como en este gobierno, hay una mayor voluntad política para descubrir la verdad histórica de lo que sucedió en Ayotzinapa, pero se topan de frente con el límite que la democracia liberal impone para protegerse a sí misma, es decir, no importa el color o sesgo político en el poder, la impunidad será impuesta más o menos, según la voluntad política del gobierno en turno, por ello, en el mismo sexenio que ocurrió la desaparición forzada y ejecuciones extrajudiciales en Ayotzinapa, con un gobierno de derecha, la salida política para protegerse fue la creación de la mentira histórica, ahora con un gobierno socialdemócrata, la voluntad política tiene un límite y este es defender a los encargados de proteger a la democracia liberal, no importa si el gobierno es más o menos democrático, lo liberal, está por encima de la misma democracia.

En este gobierno, el mismo GIEI, lo reconoce, hubo por parte del gobierno mexicano mayor voluntad política, pero también lo señalan, incluso está voluntad choca con la necesidad de mantener la impunidad por parte de las instituciones que sabemos son las responsables.

La lucha constante, ininterrumpida por parte de los familiares de las víctimas del caso Ayotzinapa y quienes de buena fe los han acompañado alcanzó para arrancarle al actual gobierno, como representante del Estado Mexicano el reconocimiento de que estos hechos son un Crimen de Estado.

Incluso, a diferencia de cientos de escritos y análisis quesque sesudos que se han producido en estos años por muchos analistas, algunos de ellos hasta con Maestría incluida, que, en concordancia con la Mentira Histórica de Peña Nieto, encontraban y aún lo hacen, en el origen de este Crimen de Estado al narcotráfico y usaban y siguen usando el concepto de macrocriminalidad para darle una salida lógica, que no verdadera, al por qué de este crimen estatal y de muchos otros.

Como lo dice claramente el último informe del GIEI en la página 285, que si uno lo dice, nos acusan que hacemos análisis desde el Muro de Berlín:

“La organización criminal está integrada por personas y aparatos institucionales que se desviaron de la legalidad para desaparecer a los estudiantes, para lesionar, y agredir a los estudiantes de Ayotzinapa y la población de Iguala, Mezcala, Santa Teresa, para atacar a menores de edad como lo eran algunos de los muchachos de los Avispones. Así mismo sirvieron a intereses criminales, lo que hace que todavía deban investigarse de manera profunda quiénes de esas estructuras ordenaron y participaron de esos hechos.

En este caso resulta muy indicativo del nivel de red que existió y existe en ese momento, y que hoy impide incluso que posibles testigos puedan hablar. La red criminal pervive y tiene sus contactos en las instituciones. Y esto aunado a procedimientos ilícitos de la PGR en su momento, ha garantizado la impunidad y la reproducción de las actividades criminales que alimentan esa economía criminal y mantienen la red.”

Pero no están hablando de una red de macrocriminalidad creada por el narcotráfico, que, como siempre dice el Estado y sus defensores, contamina a las sacrosantas instituciones, tampoco está hablando de un poder criminal no estatal que disputa territorio y control económico y político al Estado, o de un supuesto Estado paralelo que converge y se entrelaza con el Estado formal para reprimir, no, dice que, y otra vez lo repetimos para que quede claro: “La organización criminal está integrada por personas y aparatos institucionales”, más adelante dice que “sirvieron a intereses criminales “ y termina diciendo de esta red de macrocriminalidad que en el Caso ayotzinapa: “resulta muy indicativo del nivel de red que existió y existe en ese momento, y que hoy impide incluso que posibles testigos puedan hablar. La red criminal pervive y tiene sus contactos en las instituciones […]”

Incluso desde la página 103 el GIEI nos dice, con base en la ciencia y no en la creencia, que uno de los factores que facilitaron la desaparición forzada de los 43 es:

“[…] la visión contrainsurgente de los jóvenes de la escuela normal de Ayotzinapa, que conlleva un estigma, es decir una marca moral negativa, asociándolos a guerrilla o revueltas, y que se muestra en el nivel de información de servicios de inteligencia del ejército, el foco de las actividades de inteligencia centradas en sus movilizaciones, asambleas y procesos organizativos, a los que desde la institución militar se asocia con guerrillas en Guerrero desde hace décadas, y todavía en la actualidad.”

Y, repetimos por si alguien se resiste a creer en la ciencia y seguir aferrado a su creencia: “Y todavía en la actualidad” por estas verdades, el Estado mexicano y su sistema político basado en la democracia liberal, incluso en un gobierno socialdemócrata como el actual tiene un límite, las acciones concretas que protegen con un manto de impunidad a los perpetradores, sí, de Ayotzinapa, pero de todas las masacres ocurridas en México y de los pasados y actuales Crímenes de Estado cometidos en contra de un movimiento social que a ojos del ejército, aceptado por el gobierno en turno, es visto desde la visión contrainsurgente.

Y esa visión contrainsurgente, es la respuesta fundamental del por qué a los estudiantes de Ayotzinapa los convirtieron en víctimas de la desaparición forzada, en la plática que dimos para poner el periódico mural que está frente a la Cafetería del Comité Cerezo explicamos que el Estado, cualquiera en el capitalismo, para lograr la opresión de la clase en el poder en contra de la clase trabajadora ha creado o utilizado dos aparatos: los ideológicos y los represivos; en los primeros están la Iglesia, la Escuela, la Familia; en los segundos, están la policía, los militares, las leyes y los paramilitares y decíamos que con estos aparatos aplican tres estrategias para mantenerse en el poder, usan la estrategia de control social de la población, a veces como con Calderón y Peña Nieto, fundamentalmente a través del terror, a veces como con AMLO, a través de los programas sociales, medios diferentes, pero con el mismo objetivo.

Cuándo los Estados no logran ese control social y los subordinados se organizan para transformar sus condiciones de vida precaria a una vida digna, entonces los Estados aplican la estrategia de represión política, leyes y represiones que intentan eliminar el derecho humano a la protesta para que los subordinados acepten su condición y se conformen con la forma en que sobreviven.

Cuándo estas dos formas no logran aplacar a los descontentos, entonces la estrategia que engloba a las otras dos y que fundamentalmente será aplicada por los aparatos represivos del Estado es la estrategia contrainsurgente, dónde todo disidente social es visto como un insurgente, guerrillero, revoltoso, terrorista o incluso activista estudiantil.

Explicamos entonces que los estudiantes de Ayotzinapa son alumnos de una Escuela Normal Rural, propuesta que nace para educar al pueblo, cuando Lázaro Cárdenas decreta el carácter socialista de la educación en México, aunque sólo duro un sexenio este carácter socialista, dio pie a la creación de las normales rurales y a su defensa a través de su Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, la más conocida como la FECSM, es decir, todos los alumnos de las escuelas rurales son vistos desde la óptica del poder como subversivos, como terroristas, como guerrilleros, incluso ponen de ejemplo que ahí estudió y fue el dirigente de la FECSM, Lució Cabañas Barrientos, uno de los dirigentes más conocidos de la guerrilla mexicana de los años 70.

Así todos los estudiantes de una normal rural son vistos por el Estado mexicano como guerrilleros, subversivos, enemigos y por ello, todas las instituciones del Estado bajo la égida de la estructura fundamental de la democracia liberal o burguesa, el ejército, funcionaron coordinados para no sólo eliminar una amenaza a la democracia liberal, sino como un ejemplo de lo que les pasa a todos los que se organicen por tener una vida digna, por eso la saña, por eso la crueldad, la inhumanidad reflejada en este caso de Ayotzinapa.

No fue mala suerte, no fue por la droga del quinto camión, no fue por culpa de elementos malos dentro de las instituciones, no fue… Fue el Estado y fue porque siempre los ha catalogado como “Un peligro para México” un peligro para la democracia liberal, un peligro para sus aberrantes salarios, un peligro para no poder seguir explotándolos a todos ustedes.

Sólo la organización permanente y el trabajo constante por construir una democracia que represente a la mayoría y no a una minoría ha logrado conquistas sociales, incluso logró que el periodo de la Guerra de la derecha contra el Pueblo que decretó Calderón y continuó Peña Nieto se frenara, logró que ganara AMLO, no fue sólo su carisma de abuelito bonachón, fue el empuje de miles de personas que en lo más duro de la represión estatal de los últimos dos sexenios salieron a la calle, con miedo, sí, pero con la convicción de que la lucha por una vida digna es justa y es necesaria.

Y ustedes, ¿Qué democracia quieren?, nosotros nos organizamos y a eso los llamamos también, a organizarse con nosotros o, como decía un viejo comercial televisivo, con quién más confianza le tengan, para construir una democracia que beneficie a todos por igual, la que respete los derechos humanos colectivos y no los convierta en mercancía (privatice la salud, la educación, la vivienda, el agua), una sociedad que genere trabajo digno y bien pagado, una sociedad dónde las empresas mineras, de telecomunicaciones, productoras de medicinas sean empresas públicas y no privadas, una sociedad que de manera colectiva resuelva el cuidado de los infantes, de los abuelos, de la esclavitud doméstica, una sociedad dónde el color de piel o el sexo no determine el salario ni las oportunidades laborales y académicas, una sociedad donde no existan castas doradas, pero tampoco plateadas, ni siquiera las de bronce.

Gracias.

(Texto leído por Francisco Cerezo Contreras)

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