Como en el pasado análisis, iniciaremos diciendo que la crítica a los zigzagueos de la socialdemocracia en el poder y al Proyecto de Nación 2024-2030 de la próxima presidenta de México Claudia Sheinbaum, no es, ni por asomo, un llamado a votar por la ultraderecha bien representada por la gelatinera desclasada Xóchitl Gálvez, al contrario, nada que ver con esa posición política neoliberal que convierte los derechos humanos en mercancías y es responsable de la sangría interminable que padecemos en nuestro país.
Es bien sabido por los entes pensantes de la socialdemocracia y de la izquierda en general, que la crítica y la autocrítica son la herramienta adecuada para marcar errores, encontrar soluciones y no volver a repetir los mismos errores, de la autocrítica ni hablamos, ya que la socialdemocracia y el reformismo político carecen de ella, la han apartado, debido a que saben que marcar sus propios errores los obligaría a corregirlos y no están en la disposición de esa acción, y sobre la crítica a sus errores u omisiones, ya dijimos que todos tenemos derecho a hacerla, partiendo desde una posición progresista o de izquierda y no desde la derecha que, también critica errores pero no con un fin de mejorarlos, sino para eliminar todo avance social y regresarnos al obscurantismo de Calderón, aunque ellos preferirían que viviéramos quemando brujas en la Edad Media, comunistas en la Alemania Nazi o Palestinos en la guerra genocida sionista.
Estamos de acuerdo en la protección del Medio Ambiente, detener el saqueo de madera, sancionar los delitos ambientales, no otorgar nuevas licencias de explotación minera, crear nuevas Áreas Naturales Protegidas y su protección efectiva, aprobar la Ley Minera de 2023 como originalmente estaba planteada, también estamos de acuerdo con la transición energética planteada con el fortalecimiento del sector social de la economía, todas estas acciones nos parece bien, a secas, el problema de las propuestas de campaña es siempre su realización y su efectividad, por ejemplo, el primer acto entrando el nuevo gobierno deberá ser retirarle la concesión al Grupo México de Germán Larrea por la contaminación del Rio Sonora y todo el territorio aledaño, sólo así podríamos decir que las promesas se cumplen, de lo contrario serán otras nuevas leyes de espíritu perfecto, pero sin carne, puros esqueletos para adornar el día de muertos y nada de trasformación.
Sobre los proyectos de desarrollo o megaproyectos como el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el Interoceánico, parques industriales y zonas económicas a su alrededor, no podemos estar en contra sólo porque sí, estaríamos de acuerdo sí y sólo sí se cumplen ciertas condiciones: la primera, es que sean desarrollados por empresas paraestatales mexicanas y no con empresas privadas que sólo buscan lucro y no construir obra bien construida que dure años, como la línea 12 del metro, que los privados, para tener más ganancia, ahorraron en materiales y metieron materiales de menor calidad que provocaron un grave accidente, el cuál no debe repetirse, incluso debe existir una comisión independiente que revise todas las obras construidas por empresas privadas y se sancione todas las irregularidades que han cometido y a los funcionarios corruptos que lo han permitido, de lo contrario no hay transformación.
La segunda es que en la planeación de las obras debe de cumplirse la consulta previa e informada de los pueblos y personas que se verán afectadas para su realización y no simulaciones como hasta ahora ha sido en muchas ocasiones, tampoco estamos en contra del desarrollo nacional, pero si tenemos claro que este desarrollo debe de satisfacer las necesidades del pueblo y ser nacional y no para beneficio de las empresas privadas aunque sean nacionales y mucho menos las extranjeras, ese discurso de atraer inversión extranjera es una mentira, la riqueza la generamos los trabajadores, no las empresas y atraer inversiones quiere decir que una empresa extranjera use el dinero que le ha robado a los trabajadores para darnos trabajo y robarnos la mayoría que generamos los trabajadores en México, así que la cuarta transformación debe parar su discurso neoliberal de atracción de inversiones y plantearse el desarrollo de la industria nacional para satisfacer la construcción de infraestructura sin que nadie venga a robarse nuestro trabajo.
Y tercero, creación de empresas paraestatales que se hagan cargo de las finanzas y no darle al Ejército más poder económico como una forma de mantenerlos tranquilos y no en las calles deteniendo, torturando y matando al pueblo, seguir dándoles impunidad y dinero es incubar el “huevo de la serpiente”, además de permitir el chantaje que hace en contra del Gobierno civil, como en el caso de los 43 de Ayotzinapa, en el cuál, es claro que la voluntad de Verdad y Justicia se ensartan en las bayonetas del Ejército, el cual, hasta ahora, ha operado para mantenerse en la impunidad por su participación en este y miles de casos más.
Si no se cumplen estas tres condiciones, es claro que la trasformación no se profundiza, e incluso no avanza y si no avanza, ya no es transformación, es conservadurismo.
Puede que no se tenga la intensión, pero proponer nuevamente un documento de Identidad Oficial más allá del INE es una medida de carácter contrainsurgente, de control social y será usado por el Ejército para seguir sus fechorías, así que aguas con lo que desean, que puede volteárseles el chirrión por el palito y cuando se acabe este sueño “progresista” por sus propios errores, serán ustedes los que también estén en las listas negras de la SEDENA, claro la casta de la 4T podrá irse al exilio a escribir sus memorias de “lucha”, nosotros, los más, los que no nos alcanza para el avión y el exilio dorado, nos quedaremos a luchar contra lo que ustedes mismos crearon y alimentaron y claro, nadie nos pagará regalías, al contrario pagaremos con sangre su “aventura transformadora”.
Podemos celebrar la intensión de crear la infraestructura y la producción de los insumos necesarios para lograr la soberanía sanitaria y lograr un sistema nacional público, gratuito, universal e integral para la atención médica individual y de salud colectiva, incluyendo la salud mental, abrogar toda medida que favorece el modelo privatizador de la salud, nacionalizar nuevamente todo lo que los neoliberales vendieron a los privados y garantizar la gratuidad de todo lo necesario para que sea realmente gratuito, y ahí es necesario preparar al personal médico necesario para cubrir esta demanda, lo que pasa no sólo por crear nuevas universidades, sino democratizar la dinosaúrica UNAM, ahora refugio de la ultraderecha, para todo esto es necesario ir poniéndose plazos, ya que puede que salgan nuevamente con la imposibilidad de realizar lo que prometen, debido a cualquier cosa y las promesas quedarían en ese nivel, en promesas y ahí ya no hay diferencia con la derecha que dice que prometer no empobrece.
Ya por último, sin que quiera decir que el Plan Nacional 2024-2030 no contiene más puntos importantes, el tema de la seguridad, paz y justicia como le han llamado es muy importante, por lo menos y eso lo reconocemos, no llaman a crear una cárcel gigante como la derecha lo ha hecho, sin embargo en su propuesta de reformas legales para la instauración de procesos de justicia transicional, se ve que ni siquiera entienden qué es eso, básicamente, desde los derechos humanos, estos procesos equivalen a cambiar el DH a la Verdad, por el DH a la Justicia, en la práctica equivale a una sanción menor sólo a algunos responsables que cooperen con la justicia para tener un grado de impunidad, lo cual viola el DH a la Justicia, a cambio de conocer las atrocidades que cometieron, incluso sin ir más allá de los autores materiales, un proceso de Justicia debe incluir la sanción de toda la cadena de mando, los perpetradores materiales y también los intelectuales, incluyendo también a los que se beneficiaron de las graves violaciones a los derechos humanos, si no es así, es sólo un nombre de moda para mantener un grado elevado de impunidad, así que les sugerimos que le echen ganitas al estudio de los derechos humanos para no plantear “soluciones” creadas por los peces gordos o perpetradores intelectuales para mantenerse en la impunidad y sólo castigar a los pececillos o perpetradores materiales.
Otra medida con la que no estamos de acuerdo es darle más poder a las fuerzas armadas a través de la Guardia Nacional, ese discurso de que las fuerzas armadas son incorruptibles, no se a quién se lo compraron, pero la iniciativa debe ser la creación de una policía civil, AMLO no quiso hacerlo, tuvo 6 años, Claudia debe corregir el rumbo y hacerlo, de lo contrario entenderemos que es parte del chantaje de los militares al gobierno que termina y al próximo, para tener más poder y revertir todo lo que la socialdemocracia está ingenuamente planteando en el momento en que el ejército sienta que su impunidad puede ser tocada.
Incluso, ahora que hasta hablan del Buen Vivir y otras experiencias latinoamericanas progresistas, no transformar y democratizar también a las fuerzas armadas sólo termina en dictaduras, Golpes de Estado duros o blandos, en terror para el pueblo y en el regreso del capitalismo más salvaje como la política neoliberal de Calderón y Peña Nieto, así que no dejaremos de señalar este grave error que va en contra, incluso, de todo lo bueno que prometen y podrían hacer.
No quiere decir con todo esto que sólo criticamos, seguimos trabajando desde los derechos humanos para alcanzar una vida digna para todo el pueblo, así que usted que nos escucha y no es de derecha, lo invitamos a trabajar de manera organizada para que lo que esté bien del nuevo gobierno, este mejor y lo que no está bien se cambie, para que ahora sí, encontremos a nuestros desaparecidos de manera forzada como en el caso de Gabriel y Edmundo, liberemos a nuestros presos políticos, que pocos pero aún existen y siguen en la lucha por su libertad, que no existan violaciones a los derechos humanos en contra del pueblo y logremos que sancionen a los responsables de estas atrocidades que, aún y con plena conciencia de la 4T se esconden entre ellos, cambiando la playera roja de sangre por una nueva playera color guinda, así que acá seguimos, organizados en el Comité Cerezo México luchando por una transformación profunda que elimine cientos de años de explotación y no sólo administrando la justicia a largo plazo, tan largo que ha dejado de ser justicia y seguiremos criticando la aceptación de los chapulines de otros partidos, las respuestas pueriles de que la unidad a toda costa es necesaria para ganar, protegiendo a los paramilitares chiapanecos del verde ecologista hoy, ayer del PRD, antes del PRI y mañana de MORENA por poner un solo ejemplo de los muchos que podemos mencionar.