¿Por qué formar Comités Populares y para qué nos sirven?

La iniciativa de crear Comités Populares por parte de la Organización de Lucha por la Emancipación Popular y el Comité Cerezo México tiene la finalidad de organizar en la práctica, en la calle, el descontento de vecinos ante el Megaproyecto Conjunto Estadio Azteca y ante el continuo despojo de la vida digna y los derechos humanos de los habitantes de la zona de los Pedregales y otras colonias en donde las políticas de corte neoliberal han precarizado la vida.

El objetivo de quienes nos reunimos en estos Comités Populares es que todos los que los integramos trabajemos acompañando al pueblo organizado en su lucha por una vida digna y en su lucha por transformar la vida en el barrio, además trabajamos para que con la herramienta de los derechos humanos y de la organización popular disminuya el impacto del despojo y las políticas neoliberales que atentan contra la vida digna de todos nosotros.

En concreto, ante la iniciativa de construir un megaproyecto inmobiliario de corte neoliberal en el Estadio Azteca y con la complicidad de las autoridades de la CDMX para que se apruebe dicho proyecto, es necesario seguir saliendo a las calles, pero está vez de manera más organizada para recabar las firmas necesarias para que se lleve a cabo una consulta ciudadana vinculante que pregunte a la gente si queremos este megaproyecto o no.

Para recabar el 2% de las firmas necesarias para iniciar este proceso
 
democrático en la CDMX necesitamos del esfuerzo de todos los vecinos y gente solidaria organizada en Comités Populares cuya finalidad sea ser más efectivos y eficaces en las tareas necesarias para lograr una Consulta Ciudadana.

Visitas casa por casa, volanteo, perifoneo, pega de carteles, organización de asambleas vecinales, boteo, reparto del Fragua y otras actividades necesarias para lograr nuestro objetivo de organizarnos para lograr las firmas necesarias, pero también para ir organizándonos en torno a otras necesidades sentidas en la zona como es la falta de agua.

Hasta ahora hemos funcionado mediante asambleas vecinales, lo cual no es malo ni debe cambiar, pero a la hora de traducir las ideas a la práctica, sólo unos cuantos participamos y es necesario que todos participemos con pequeñas o grandes tareas que en conjunto nos permita lograr los objetivos que nos han unificado con otros vecinos y referentes organizativos en la zona.

El primer punto es la Derogación del Proceso de Consulta Vecinal para Grandes Construcciones que sólo benefician al capital neoliberal, ya que existiendo los mecanismos de democracia participativa como es la Consulta Ciudadana, el Gobierno de la CDMX se sacó de la manga este documento para acelerar y aprobar los diferentes proyectos inmobiliarios neoliberales, sin consulta real a los pueblos y colonias afectadas; el segundo punto es, No al Megaproyecto Conjunto Estadio Azteca, ya que este megaproyecto neoliberal impactará de manera directa en las colonias y pueblos alrededor del Estadio Azteca, elevando las tarifas de agua, luz y predial y en definitiva expulsando a quienes menos tienen de la zona, es el proceso que llamamos gentrificación, el tercer punto es la realización de una Consulta Ciudadana vinculante, que obligue a las autoridades de la CDMX a poner en práctica lo que en la Constitución de la CDMX se ha plasmado como un avance en la participación democrática de la ciudadanía respecto a actos que afectan a los habitantes de la ciudad de México; el cuarto punto es que el servicio de agua potable tenga una tarifa social justa y haya servicio, históricamente la zona de los Pedregales y otras colonias de la ciudad han sufrido la falta de agua, actualmente los Pedregales es zona de tandeo, es decir, zona que nunca han tenido agua corriente y que a pesar de esta situación, como de muchas otras colonias de la CDMX, los recibos de cobro llegan con tarifas muy altas que son casi imposibles de pagar para la gente y que además son injustas y el último punto, no menos importante, sino al contrario, luchamos por un alto a las políticas neoliberales contra barrios, pueblos y colonias de todo México.

Como organizaciones en lucha sabemos que lo inmediato es detener el megaproyecto Estadio Azteca, sin embargo, no se detiene esta lucha constante por una vida digna para todos y sabemos que es el Capitalismo Neoliberal, el origen de la desigualdad, la pobreza y la gentrificación en las zonas populares tanto de la ciudad de México como de otras muchas ciudades de todo nuestro país, por ello aunque estamos concentrados en la lucha contra el megaproyecto Estadio Azteca, no olvidamos y por ello nos organizamos con los vecinos de la zona para continuar esta lucha por agua, educación, salud, trabajo digno y otras carencias que se viven en la zona y en nuestro país.

Mientras estamos organizándonos, el Capital Neoliberal no se detiene, en días recientes la empresa inmobiliaria pagó a la empresa encuestadora Telemetría para que realizara encuestas relacionadas al megaproyecto Estadio Azteca en diversas colonias afectadas de Coyoacán y Tlalpan, los vecinos organizados se dieron cuenta y fueron a explicarles a las encuestadoras en su mayoría, que no tenían por qué estar haciendo dichas encuestas ya que hay una lucha en contra del megaproyecto y que no se responderían dichas encuestas, ya que sólo hablan de las medidas (migajas) de mitigación que Televisa promete, aunque nunca cumpla.

Mientras esto sucede con la empresa inmobiliaria, las autoridades de la Ciudad de México siguen intentando embaucarnos con sus encuestas para grandes construcciones, que saltándose la propia Constitución de la Ciudad de México quiere aplicar para aprobar dicho proyecto, ¿Cuánto están recibiendo para seguir permitiendo las encuestas privadas?, ¿Acaso como se dice es el apoyo de empresas neoliberales a la candidatura presidencial de Claudia Sheinbaum? Si es así, qué tipo de gobierno nos espera en el 2024, ¿uno que permita el regreso de las políticas neoliberales más agresivas al país?, todo lo poco que se ha avanzado para frenar estás políticas por parte de AMLO serán letra muerta si gana la o el próximo presidente de la mano de las grandes empresas neoliberales.