POR ISAÍN MANDUJANO @isain, 27 JUNIO, 2017
TUXTLA GUTIÉRREZ, Chis. (apro).- A cuatro meses de la “tortura y ejecución extrajudicial” de Humberto Morales Sántiz, de 13 años, perpetrado en una comunidad de Ocosingo, un equipo de peritos y forenses argentinos llegaron hoy a Chiapas para exhumar y analizar su cuerpo, luego de que sus padres, amigos y familiares, denunciaron que su muerte fue “un crimen de Estado”.
Roberto Mendoza Pérez, miembro del Frente Nacional de Lucha por el Socialismo (FNLS) dijo hoy que a cuatro meses de ese crimen aún “no hay avances en el proceso judicial, ni siquiera existen líneas de investigación para dar con los responsables materiales e intelectuales” y fue por eso que tuvieron que venir extranjeros para hacer la investigación que la Fiscalía General de Chiapas ha omitido.
En conferencia de prensa dijo que desde que se cometió “el crimen de Estado” contra Morales Sántiz, el gobierno a través de sus funcionarios e instituciones actuaron con negligencia, dilación y burocratismo al no realizar una investigación pronta y expedita.
Con el cadáver del menor, la comunidad bloqueó la carretera Río Florido para exigir la presencia del fiscal, quien finalmente se presentó hasta el pasado jueves 2, “casi 36 horas después de que la comunidad encontrara al niño sin vida y la familia avisara al fiscal de los hechos”, señalaron las organizaciones defensoras de derechos humanos.