CIUDAD DE MÉXICO (apro).- A diez años de la detención y posterior desaparición forzada de los luchadores sociales Gabriel Cruz Sánchez y Edmundo Reyes Amaya en el estado de Oaxaca, la Fiscalía Especializada de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la Procuraduría General de la República (PGR) se comprometió a instalar una mesa de trabajo para revisar el caso.
En dicho encuentro, que se llevará a cabo el próximo 13 de junio, participarían funcionarios de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) y familiares y representantes legales de la víctimas.
Estos últimos propondrán a las autoridades una “ruta de trabajo” con las peticiones de las familias de Gabriel y Edmundo y los puntos de la sentencia que dictó el Tribunal noveno, en noviembre de 2014.
Sandino Rivero, abogado de los familiares, dijo que en la reunión de este martes se hicieron tres planteamientos concretos a las autoridades de la PGR: que se trasladen a los lugares donde fueron detenidos Gabriel y Edmundo (incluidas las instalaciones militares); que se citen a comparecer a altos mandos militares en funciones en 2007 (fecha de su desaparición), y que se informe a los familiares de las inhumaciones de cadáveres en los centros castrenses para la posible identificación de los cuerpos.