El Comité Cerezo México, organización de derechos humanos, tuvo durante casi once años un medio impreso (la revista Revuelta) para difundir información relativa a la lucha por la libertad de los presos por motivos políticos; así como, nuestros análisis respecto a cómo el Estado mexicano violaba los derechos humanos y cómo implementaba una guerra contra el pueblo, sus organizaciones y sus dirigentes, disfrazada de “guerra contra la delincuencia organizada y el narcotráfico”.
Lamentablemente, no tuvimos la capacidad de continuar con la impresión y distribución de nuestra querida revista, y ésta dejó de circular en 2013.
Sin embargo, acciones como la lucha por la defensa y promoción de los derechos humanos, el contacto permanente con diferentes personas en colonias y barrios, la realización continua de talleres y cursos, nos obligaron en cierta medida, a retomar la necesidad de imprimir una publicación.
La Pedrada se elaboró en 2015 como un esfuerzo de comunicación popular que debía, partiendo del diálogo, generar reflexión con sus lectores y entre quienes la elaboraban; además de fortalecer el proceso de organización en las colonias que luchaban contra el proyecto que llamaban Zonas de Desarrollo Económico Especial (ZODES) en algunas colonias de la Ciudad de México.
Las ZODES eran un proyecto de gentrificación: de expulsión de personas de zonas populares para convertir esas zonas en lugares para empresas habitadas por otras personas con mayores recursos económicos.
Nuestra publicación a lo largo de estos años, ha tenido cambios en su formato, en sus temas, en el equipo que la realiza y distribuye, además de los tiempos de publicación.
Haciendo un balance, hemos logrado crear una publicación impresa que se sostiene con la cooperación voluntaria de sus lectores, que expresa la voz del pueblo, sus opiniones, que explica y difunde los derechos humanos de la población y denuncia los abusos de las autoridades; pero no hemos logrado que nuestra publicación cumpla al cien por ciento su función de organizador colectivo.
Ahora con este número que lees, iniciamos una nueva época de nuestra querida publicación. ¿Qué buscamos que sea diferente? Lograr que cumpla al cien por ciento su papel de organizador colectivo en dos aspectos: primero que el equipo que elabora y distribuye la publicación crezca y se fortalezca; y segundo, que las personas a quienes llegue la publicación puedan encontrar en el Comité Cerezo México un espacio de organización para defender sus derechos humanos o luchar por ellos de manera colectiva.
El otro objetivo principal es que La Pedrada logre expresar la amplitud del trabajo de nuestra organización, pues en esta nueva época será el medio de información y difusión del Comité Cerezo México. Ahora nos enfrentaremos al reto de que nuestra publicación trascienda la Ciudad de México y llegue a lugares donde antes no lo hacía.
Nuestra publicación seguirá siendo impresa, a pesar de que este número sólo sea digital por la pandemia y la medida de quedarse en casa que limita su distribución mano a mano, pero no pantalla a pantalla. Será impresa porque hoy más que nunca es más evidente que el internet no es accesible a toda la población; y nosotros queremos que nuestra publicación llegue a quienes no gozan de este derecho humano.
Por último, este número es aún más importante porque se publica en el mes en el cual se desarrollan actividades en el marco de la semana internacional del detenido desaparecido; de nuestros detenidos desaparecidos, pueblo de nuestro pueblo, historia de nuestra historia que debemos traer al presente.
La presentación con vida de todos los detenidos desaparecidos sigue siendo una exigencia que no hemos visto realizada por este gobierno. Sabemos que hay muchos intereses económicos y políticos de por medio, y que son estos los que se interponen para que se cumplan con los derechos a la Verdad, a la Justicia y a la Reparación Integral del Daño; sin embargo, si de verdad el cambio es profundo, este gobierno debe juzgar y sancionar a los responsables intelectuales, materiales, y beneficiaros de todas las detenciones desapariciones.
Mientras no sea así el pueblo seguirá luchando, ejerciendo su derecho humano a la protesta social y a la Memoria, esperamos que no por ejercer estos derechos, la represión se vuelva la respuesta de quienes se oponen a un cambio profundo en nuestro país y que las instancias federales no repitan lo que han dicho últimamente: que ellos no pueden controlar a los gobiernos de los estados, o que nieguen la presencia de fuerzas federales en actos de represión cuando existen evidencias públicas que demuestran lo contrario.
¡Porque vivos se los llevaron, vivos los queremos!
Porque ser defensor de derechos humanos no es sinónimo de ser delincuente
Comité Cerezo México, organización de derechos humanos.
Premio de la Paz de Aquisgrán, Alemania 2012.